Qué mejor salsa para mojar pan que nuestra Salsa Romesco con aceite de oliva. Con todo el sabor del tomate y de los frutos secos.
Vamos a aprovechar que estamos en temporada de calçots y disfrutar de ellos unas semanas más, con esta receta de pan naan de calçots para dipear con Salsa Romesco. Una receta para compartir en pareja o entre amigos.
Consulta nuestra sección Caprichos de Calçots para ver todas las recetas que hemos elaborado con ellos.
Tamizamos la harina y la disponemos sobre la mesa en forma de volcán. Diluimos la levadura en la leche tibia y la vertemos en el volcán de harina, junto con la sal, el yogur y el aceite. Mezclamos con cuidado y amasamos. Dejamos reposar en un bol untado con aceite hasta hasta que doble el tamaño.
Mientras, cortamos los calçots en juliana y los salteamos en una sartén con un poco de aceite. Cuando estén doraditos los sacamos del fuego y dejamos que se enfrien un poco.
Pasado el tiempo de reposo de la masa, amasamos de nuevo y hacemos bolitas de unos 60 gramos. Cogemos una bolita y una cucharada de calçots y lo mezclamos bien hasta que se integren los calçots. Aplastamos con los nudillos y estiramos con el rodillo hasta conseguir una masa fina.. Así con todas las bolitas.
Colocamos las porciones de pan en una bandeja de horno con papel sulfurizado untado con aceite y dejamos reposar unos 20 minutos más. Pintamos con la mantequilla derretida y horneamos, en horno precalentado, unos 10-12 minutos a 220º.
Servimos los panes Naan envueltos en un trapo caliente para que se mantengan tiernos y acompañamos con un cuenco de salsa Romesco para ir dipeando.